Publicado enAño 32 Núm. 347 Puntos de encuentro
Voces no escuchadas, rostros invisibles. Los pequeños miembros de las familias de jornaleros agrícolas en California frente al Covid-19
En marzo de 2020 empezó a decirse en los medios de comunicación y redes sociales que los trabajadores del sector salud eran esenciales y por tanto necesitaban consideraciones especiales para hacer frente a la pandemia y poder continuar trabajando sin arriesgar su vida y la de su familia. Para abril, los trabajadores del campo y las agroindustrias, también se consideraron esenciales porque se encargaban de producir, cosechar y empacar la comida que llegaba a las casas de todos los norteamericanos. Salieron varias publicaciones sobre lo importante que era mejorar sus condiciones de trabajo para evitar que se enfermaran. Sin embargo, el número de trabajadores contagiados por Covid-19 empezó a crecer y las condiciones de trabajo se mantuvieron en los campos agrícolas y en las agroindustrias donde los inmigrantes trabajan, en general, de manera igual (Flores, 2020).






