Territorios, autonomías y cuidado de la vida

Víctor Leonel Juan Martínez
CIESAS Pacífico Sur – PLURAL
Alma Patricia Soto Sánchez
CONAHCYT – CIESAS Pacífico Sur

Los Pueblos indígenas en México enfrentan actualmente la intensificación de conflictos socioambientales frente a proyectos históricos de desarrollo y extractivos que generan despojo. En los últimos años se ha presentado una disputa por los territorios derivados de cambios legislativos, políticas públicas, intereses económicos y procesos de largo aliento, que se reinventan para buscar la apropiación y la explotación de la naturaleza y de las personas que los habitan.

Al mismo tiempo, se van conformando procesos diversos que convergen en el objetivo de favorecer la permanencia de las comunidades estableciendo nuevas condiciones y luchas para la defensa del territorio y la vida, en el caso de los textos que nos acompañan, esto se piensa particularmente en regiones indígenas.

Desde uno y otro espacio, se encuentra en disputa no sólo el espacio en que se construye el territorio, sino también los diversos significados que se le otorgan desde distintas perspectivas: la madre tierra y la especial relación que las comunidades indígenas tienen con su hábitat; las demarcaciones que el Estado genera para ejercer su jurisdicción, o bien en la que distintos actores disputan el ejercicio de la propia.

En medio de estas tensiones se encuentra la disputa por los recursos naturales que se encuentran en esas geografías: desde la explotación de recursos naturales del subsuelo (minería, agua); las que se encuentran en la superficie (recursos forestales, plantas, cultivos, rios, lagos, entre otros); las que surcan el espacio aereo (proyectos eólicos); hasta la producción intelectual o técnica que se hace desde las comunidades indígenas de los elementos que conforman su espacio vital, y que también buscan ser colonizados (plantas medicinales, técnicas de cultivo, entre otros); sin dejar de lado, la defensa por su protección ante acciones contaminantes, que vulneran los territorios y, con ello, el medio ambiente de las comunidades que ahí se asientan.

Desde las comunidades se responden tanto a estos procesos y visiones, como a ajustes propios, para lo cual han realizado cambios internos, como la mayor visibilización y un papel más protagónico de las mujeres en la defensa del territorio; la construcción de alianzas inter-comunitarias, el empleo del litigio estratégico, la configuración de alianzas entre sociedad civil, comunidades y academia, etc.

El Estado, por su parte, genera también distintas políticas públicas, bien para atender los rezagos, reclamos y conflictos, bien para su empleo instrumental para recuperar el control de esas regiones y tener la plena disposición de los recursos naturales que en ella se encuentran o el capital político y social que representan.

En razón de lo anterior, en este 2024 realizamos el Seminario Permanente de CIESAS Pacífico Sur y el Programa Pluralismo Jurídico y Eficacia de Derechos (PLURAL), Territorios indígenas. Autonomía y Cuidado de la vida. El objetivo de este ejercicioes la construcción de una reflexión colectiva, interdisciplinaria. Consideramos que este diálogo debía partir de reunir distintas miradas, trayectorias, ámbitos en que se movilizan y se realizan los procesos sociales; por ello se tuvo el concurso de actores y actoras de distintas trayectorias de vida y experiencias: académico, regiones y comunidades indígenas, autoridades estatales, organismos de la sociedad civil, organizaciones sociales e indígenas, que nos ha abierto escenarios diversos de las nuevas dinámicas, retos y experiencias de lucha en torno a los territorios indígenas de México, así como perspectivas y rumbos que nos dan pistas para poder tejer-nos.

Es este seminario el marco desde el cual surgen varios de los textos que aquí se presentan. Los ejes articuladores de estos trabajos son: territorios, autonomías y pueblos indígenas; género y derechos agrarios; justicia y conflictos socioambientales.

También buscamos conocer las coincidencias y diferencias que se presentan, a partir de ejes o procesos similares, en las distintas regiones del país; para abrevar de las experiencias distintas, los puntos de articulación, las diferencias.

Es por ello que se presentan textos de diversas geografías, trayectorias y experiencias:

Víctor Leonel Juan plantea cómo en un “Estado de Derecho”, como el que dota de una organización sociopolítica a un Estado-nación, el territorio toma también significado a partir de su reconocimiento constitucional, abordando las complejidades, tensiones y conflictos que se presentan a partir de ello.

Ana María García Arreola analiza dos aspectos centrales en Oaxaca: la turistificación y los proyectos extractivos; a partir de ahí borda sobre las agresiones a los territorios indígenas, y las respuestas a través de procesos de resistencia y defensa desde una articulación regional.

Mauricio González González analiza el tema de las desapariciones, aparición de guardias blancas y procesos de violencia y represión en un análisis que reivsa los procesos de racialización y racismo ambiental en la Huasteca poblana.

Mauricio Arellano aborda la relación entre género, derechos agrarios y territorios indígenas y analiza las tensiones, conflictos y alternativas en torno a lo comunitario y al cuidado de la vida, gestadas desde elentendimiento de la tierra como herencia patrilineal y el territorio como herencia ancestral.

Gabriela Torres-Mazuera analiza los obstáculos y problemas que enfrenta la participación para mujeres y jóvenes rurales para acceder al derecho a la tierran, en una revisión de la normatividad agraria y los diversos ámbitos de los ejidos y comunidades.

Edith Cruz Zárate presenta la experiencia de la organización Tequio Jurídico en el acompañamiento del proceso regional de la Asamblea del Pueblo Chontal Para la Defensa de Nuestro Territorio (APCHDNT), en Oaxaca, y las distintas estrategias desplegadas.

Martha Angélica Olivares Díaz aborda cómo la presencia/permanencia de comunidades originarias en las ciudades representa su resistencia y reinvención, dentro de un territorio que por excelencia se ha coronado como símbolo de la modernidad y el despliegue capitalista a través del tiempo: la Ciudad de México.

Wendy Bazán Landeros realiza un diagnóstico sobre los procesos de injusticia socioambiental en la Península de Yucatán, así como de los mecanismos de resistencia y perspectivas a futuro que se realizan desde las comunidades mayas.

Alma Soto plantea como la relación de las comunidades con la naturaleza conjugada con su resistencia frente a un sistema político, cultural y económico cuya expansión busca incorporarlos y transformarlos en fuente de materia prima y mano de obra, es resistido a través de proyectos de educación superior, que disputan la construcción de saberes y de los espacios, buscando permanecer como pueblos.

Los distintos temas y temáticas abordadas, nos invitan a pensar en las múltiples aristas desde las cuales los pueblos indígenas están disputando su cotidianidad y la vida en los territorios que habitan y de los que históricamente han sido parte. Muestran también los distintos rostros, actores, procesos, desde los cuales articulan estas defensas y luchas; nos enseñan también no sólo la resistencia permanente, sino también los logros que han alcanzado.

Se presentan textos desde distintas generaciones y actores, como la academia y la sociedad civil, cuyos énfasis y tonos podemos reconocer desde las formas de textualizar y nombrar, pero también podemos reconocernos en las preocupaciones comunes de reconocer y valorar los procesos a través de los cuales los pueblos defienden sus territorios, en un momento donde las múltiples problemáticas ambientales demandan respuestas desde todos los rincones de la tierra.