La pandemia representa un desafío mayúsculo para el sistema educativo. Tener escuelas cerradas desde marzo y estar experimentando con sistemas de educación a distancia en contextos de brecha digital tiene repercusiones de muy alto alcance, tanto en lo social como en lo educativo. El objeto de este número es discutir cómo este regreso a clases en situación de confinamiento puede ser analizado desde diversas miradas de la investigación social.
Las contribuciones de este número muestran esa diversidad: se presentan análisis sobre educación básica, media superior y superior, centrándose en varias temáticas, como los procesos de adaptación de los procesos educativos en los meses de confinamiento, las experiencias de la “vieja” y la “nueva” normalidad, las potencialidades y limitaciones de la respuesta gubernamental con la estrategia “aprende en casa” así como el uso de testimonios sobre estos procesos en estudiantes, maestros e instituciones educativas.
A pesar de esta diversidad, hay tres temas que están presentes en todos los textos dedicados a analizar la educación en procesos de confinamiento. El primer tema tiene que ver con la amplitud de las brechas y los efectos amplificadores de la desigualdad que esta pandemia genera en los sistemas educativos ya muy desigual desde antes del confinamiento: las enormes brechas de origen étnico, regionales, socioeconómicas y de acceso y capacidades a nuevas tecnologías y conectividad están presentes en todas las contribuciones. Así, por ejemplo, en educación básica, el texto de Frida Villavicencio muestra las enormes brechas que las poblaciones que hablan lenguas originarias tienen para acceder a material didáctico en su lengua. Patricia Meixueiro muestra las desigualdades en las experiencias escolares en padres, docentes y los propios estudiantes. En educación media superior, Gonzalo Saraví se centra en analizar cómo la pandemia amplía las desigualdades preexistentes, con efectos negativos en el debilitamiento del vinculo escolar, el aprovechamiento escolar, y en el bienestar psicosocial de los adolescentes. De igual manera, en educación superior, Gemma Sánchez, Marina Beltrán y Daniela Montenegro aluden, en sus testimonios sobre cómo ha sido estudiar un posgrado en pandemia, a las desigualdades en el acceso a tecnología y en habilidades digitales.
Un segundo tema general tiene que ver con la capacidad para pensar recomendaciones y alternativas ante las nuevas y viejas desigualdades y efectos negativos que la pandemia trajo al campo de la educación. Existe una gran cantidad de recomendaciones y alternativas que se están desarrollando, inclusive desde CIESAS. En educación básica, por ejemplo, los textos de Lourdes de León Pasquel, por ejemplo, describen proyectos que se están llevando a cabo en el último semestre de 2020 para remediar en parte la emergencia que viene. Hevia sintetiza una serie de recomendaciones internacionales y Anabel Velásquez y Samana Vergara-Lope muestran los primeros resultados de una intervención radial para disminuir el rezago de aprendizajes en Veracruz, por medio del proyecto Medición Independiente de Aprendizajes (MIA). De igual manera, Valentina Garza y su equipo de la subdirección de docencia de CIESAS muestran todos los procesos de adaptación que hubo que llevar a cabo para asegurar la continuidad de los posgrados de nuestra Institución.
La tercera temática, relacionada con las anteriores, tiene que ver con la centralidad que adquiere la conectividad, el acceso a habilidades digitales en esta “nueva normalidad” y el potencial cambio de paradigma que esto representa. En su texto, Eva Salgado reflexiona en torno a la construcción de esta nueva normalidad, identificando dimensiones analíticas tan novedosas como los contenidos televisivos. Salvador Sigüenza muestra un ejemplo claro de cómo las nuevas tecnologías pueden ayudar también a la comprensión de nuestra historia por medio del proyecto “Oaxaca en el tiempo”.
Además de estas contribuciones, este número incluye dos textos que trascienden la coyuntura de la pandemia y que de cierta manera muestra dimensiones de los problemas educativos. En su artículo, Minerva Oropeza se centra en los procesos de adquisición fonológica. García-Palermo y Salinas-Quiroz, por otro lado, muestran la persistencia de los problemas de inclusión de los sistemas educativos, mostrando el caso de la discriminación hacia las niñeces trans* en Veracruz.
De esta forma, esperemos con este número mostrar diversas aristas analíticas que la pandemia sanitaria produce en los sistemas educativos, centrándonos en los problemas, pero también en las soluciones y alternativas que emergen ante este panorama tan incierto.
Xalapa, octubre 2020.
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