Presentación Ichan Tecolotl Núm. 371

Mariana Favila Vázquez
CIESAS Ciudad de México

Este número de la revista Ichan Tecolotl reúne textos que ofrecen a las y los lectores un panorama amplio sobre las preguntas de investigación y las iniciativas que se han desarrollado recientemente en el campo de las humanidades digitales (HD) en Latinoamérica. Dado que esta (inter)disciplina es, en apariencia, reciente en el contexto local, tiende a haber un halo de ambigüedad y suspicacia sobre su naturaleza y pertinencia en los ámbitos académicos e institucionales. Con el propósito de atender las inquietudes y creciente interés en las HD, los artículos reunidos en la sección Puntos de encuentro desarrollan ejemplos concretos de iniciativas, plataformas y recursos que buscan apoyar e impulsar la labor pedagógica, de investigación y divulgación en el contexto del giro digital que ha alcanzado a las disciplinas humanísticas practicadas en Latinoamérica, incluidas la historia, la antropología, la geografía, la literatura y la arqueología, entre otras.

En la primera contribución, Patricia Murrieta Flores, del Departamento de Historia de la Universidad de Lancaster, Inglaterra, escribe desde su vasta experiencia personal y académica cómo ha llevado a cabo el diálogo entre la inteligencia artificial y las disciplinas histórica y arqueológica en el contexto novohispano. Sus líneas seguramente resultarán inspiradoras para quienes comiencen a explorar el universo de las HD.

El segundo texto, de Diego Jiménez Badillo (MTM-INAH), Salvador Ruíz Correa (IPICYT) y Omar Mendoza Montoya (Tecnológico de Monterrey), expone la aplicación de un tipo de análisis computacional en la investigación arqueológica. Este es un ejemplo esencial para comprender las oportunidades que brinda la cooperación entre quienes estudian el patrimonio cultural y los científicos computacionales.

En el tercer texto, Daniel Martínez González, del Instituto Rosario Castellanos, presenta una propuesta didáctica desarrollada desde la interculturalidad en México y las HD. Ésta se enfoca en la enseñanza-aprendizaje de la historia precolonial de las culturas indígenas de México a nivel secundaria y se construye desde el aprovechamiento de diversos recursos digitales.

La cuarta contribución es de Sofía Laines, egresada del CIESAS-CDMX, quien presenta un análisis del lenguaje usado en las subastas de libros organizadas por un proyecto cultural de la Ciudad de México llamado “El rincón de la Cháchara”. El carácter híbrido de las subastas (por un lado, realizadas en un lugar concreto de la ciudad y por otro, a través de Facebook) le permitió acercarse a la etnografía digital como metodología de investigación antropológica.

Posteriormente, la estudiante del CIESAS-CDMX, Valeria C. de Pina Ravest recupera sus reflexiones a raíz de tener que realizar principalmente etnografías digitales a causa de la pandemia por Covid-19 para su trabajo de investigación doctoral centrada en las evocaciones fotográficas y cartográficas del Lago de Texcoco en los siglos XX y XXI. Una egresada más del posgrado de CIESAS-CDMX, Eréndira Martínez Almonte, describe su experiencia a partir de la consulta de producciones audiovisuales. La autora trasciende la pantalla en la que observó sus fuentes, ofreciéndonos una reflexión sobre la utilidad de recurrir a los archivos digitalizados audiovisuales, igualmente en el contexto del confinamiento que inició en 2020. Estos tres textos en conjunto aportan ejemplos de la urdimbre digital en la que hoy en día puede realizarse el trabajo etnográfico, con o sin pandemia de por medio.

La séptima colaboración, a cargo de Gabriel Tolentino Tapia (FLAD, México) discute el tema de la inclusión en el mundo digital a través de la descripción e interpretación de tres proyectos que giran en torno a las formas de vida asociadas a la discapacidad. La siguiente aportación es de la pluma de Luis Alberto Alcántara Chávez, arqueólogo y estudiante de maestría de la Universidad Iberoamericana que reflexiona sobre la importancia y utilidad de las bases de datos para la investigación humanística. A la par, ofrece una guía rápida para la elaboración de proyectos de HD a partir de la experiencia con su propio proyecto, ArqueoData.

Los siguientes dos textos ofrecen una visión externa a México. Por un lado, María Juana Espinosa Menéndez, de la Biblioteca Daniel Cosío Villegas (COLMEX), presenta un panorama histórico sobre el desarrollo de las HD en Colombia a través de las voces de quienes participaron en el mismo. Mientras que el artículo de Matteo Sartori (UC, Chile/ UCF, Venecia), Julia Prakofjewa (UCF, Venecia) y Andrés Moreira-Muñoz (PUCV, Chile) presentan un caso de estudio concreto desde las geohumanidades digitales enfocado en los conocimientos medicinales indígenas de plantas nativas de Chile.

En la decimoprimera contribución, Flor Trejo Rivera (SAS-INAH) reflexiona sobre las HD y la arqueología e historia marítimas mediante la descripción de un proyecto institucional dirigido a la difusión y conservación de fuentes históricas. Esta sección concluye con un texto de mi autoría, en el cual contextualizo los proyectos desarrollados por el CIESAS que constituyen un antecedente fundamental para el campo de las HD en México.

En la sección Antropovisual, Aban Flores Morán (CEPE-UNAM) y Pablo Escalante Gonzalbo (IIE-UNAM) describen la concepción y narrativa de un mural híbrido (pintado a mano y digital) que recientemente fue inaugurado en la sala 8 del espacio dedicado al México Antiguo en el Museo Amparo, Puebla. Finalmente, en Cinemantropos, Gabriela García Gorbea, egresada del CIESAS-CDMX, presenta una reseña sobre la película de ciencia ficción Mr. Nobody (Jaco Van Dormael, 2009), con la cual, desde el análisis de una narrativa no lineal y que explora los multiversos, cerramos este número de Ichan Tecolotl dedicado a los avances y perspectivas que se han desarrollado en Latinoamérica en el campo de las humanidades digitales.