Las y los intérpretes-traductores de lenguas indígenas en México: algo más que ejercer una profesión[1]

Anaid Sierra [2]
Egresada del doctorado en Antropología, CIESAS Ciudad de México


Historias… traductores indígenas de México es un libro que trata, como su título anuncia, sobre la historia personal y profesional de ocho intérpretes-traductores en lenguas indígenas, cuya labor se ha desenvuelto principalmente, en instituciones de procuración de justicia de la Ciudad de México. A través de sus 150 páginas, la historia individual de sus protagonistas va escribiendo, línea a línea, la historia colectiva del ejercicio contemporáneo de la profesión, lo que muestra el gran compromiso que las personas y pueblos indígenas han asumido para hacer efectivos sus derechos frente a las múltiples omisiones del Estado mexicano para garantizarlos.

Ser puente entre dos mundos, a través del conocimiento de la lengua y la cultura dentro de los gruesos muros de los penales y tribunales judiciales, ha significado, también, superar incontables obstáculos en la práctica cotidiana. Entre éstos, varias historias coinciden en señalar la falta de espacios formales para su profesionalización y el perfeccionamiento de habilidades y capacidades, así como la ardua tarea que representa sensibilizar en el trato cotidiano a los operadores de justicia para que reconozcan el valor social y político de la profesión y dignifiquen su trabajo.

Muchos de los personajes de las historias que se muestran, han visto sus vidas atravesadas por injusticias, racismo y desigualdad social debido a su origen étnico, situación que muchas veces comparten con las personas a las que asisten en los tribunales. De ahí que algunos ven entrelazada su vida personal y profesional cultivando un sentido ético profundo, que se desearía en cualquier funcionario público.

El libro tiene la virtud de estar escrito por la pluma de autores y autoras indígenas que hoy en día se inician en la noble labor de interpretar y traducir, además de participar en diversas actividades para fomentar la efectividad de los derechos indígenas en múltiples ámbitos, comunitarios e institucionales. Por ello, el libro representa un sentido homenaje en vida para estos profesionales que han sabido sembrar derechos en amplias parcelas de injusticias, haciendo más transitable el camino para quienes siguen sus pasos.

Al ser una profesión históricamente poco valorada en contextos neocoloniales, la labor pionera de los intérpretes a los que alude el libro fue fundamental para preparar el terreno de un presente y un futuro para el gremio. El vínculo interinstitucional y la apertura de los canales y espacios para la transmisión de la experiencia personal como semilla del saber, representan un legado invaluable para sus colegas más jóvenes en los escarpados caminos de la incidencia política. Un legado que viene a sanar un poco esas heridas históricas de las cuales todavía adolece la sociedad mexicana.

Así, la historia de Catalina, Agripina, Agustín, Alfonso, Raymundo, Rosaldina, María y Rafael, hablantes de las lenguas nanj nïn´ïn, ayuujk, bats´il k´op, náhuatl, ñu savi, p´orhé, mam y thono o´odham, respectivamente, son enseñanza, legado, historia personal y colectiva, pero también un gran paso en un camino incierto.

La publicación de este libro se da en 2019, año declarado por la Asamblea General de las Naciones Unidas como el año internacional de las lenguas indígenas. Teniendo como coordinadora del mismo a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO por sus siglas en inglés); el objetivo central de la iniciativa apunta a sensibilizar a la sociedad en general y a fomentar el valor histórico, político y cultural de las lenguas indígenas frente al riesgo inminente de su desaparición.

En ese contexto, el libro viene a sumarse a una serie de actividades de incidencia política impulsadas por colectivos civiles indígenas como la Organización de Traductores, Intérpretes Interculturales y Gestores en Lenguas Indígenas A.C. (OTIGLI) que, a lo largo de sus veinte años de vida, ha propiciado la intervención de varios de los intérpretes traductores que figuran en la obra. Como se cuenta en su introducción, esto sólo ha sido posible a partir de la celebración de convenios con diversas instituciones de administración de justicia como la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX) en el año 2002; el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMX) en 2004 y con el Consejo de la Judicatura Federal (CFJ) en 2005, por mencionar algunas. Lo anterior demuestra el carácter frágil y contingente que enmarca las condiciones laborales de las y los intérpretes-traductores que prestan sus servicios en las instituciones judiciales de nuestro país, ya que contar con estos convenios en las demás entidades que lo componen no es la regla sino la excepción.

Con la ayuda financiera del Proyecto de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC), OTIGLI A.C. ha logrado poner en papel un fragmento de la historia de la profesión de traducir e interpretar, esperando que se convierta en una herramienta útil para la defensa de los derechos indígenas y haciendo hincapié en el papel de los derechos lingüísticos como porteros de otros derechos.

En suma, es un libro esencial para entender la impartición de justicia en un contexto como el mexicano, donde su carácter pluricultural y plurilingüe sigue siendo negado. La historia de vida, como metodología elegida para la confección de la obra, resulta un acierto para sumergir al lector interesado en las implicaciones sociales, políticas, e incluso afectivas, que subyacen a la práctica profesional de los y las intérpretes indígenas en ámbitos judiciales. Es un libro obligado para juristas, antropólogos y público en general, ya que enseña que los derechos viven en todas las lenguas y que, lejos de ser un obstáculo, hablar una lengua indígena permite preservar saberes y formas de vida valiosas.

Datos del libro reseñado


Guillermo Alejo Carlos (coord.) (2019), Historias… traductores indígenas de México, México, Nuestra Palabra Ediciones.

  1. Agradezco a Edith Matías Juan y a Guillermo Alejo Carlos por las entrevistas realizadas para compartir conmigo sus experiencias y puntos de vista como autores del libro.
  2. Integrante del Foro Latinoamericano de Antropología del Derecho, Sección México.

    anaidsierra@hotmail.com