Cumple 23 años el seminario académico Kw’anískuyarhani Estudiosos del Pueblo Purépecha


Carlos Salvador Paredes Martínez
ciesas Ciudad de México
casapama@gmail.com
Facebook: yo soy Kwanis (https://www.facebook.com/groups/742961272476901/)

El 25 de julio de 2020 el seminario académico Kw’anískuyarhani Estudiosos del Pueblo Purépecha cumplió 23 años de reuniones bimestrales. Hasta antes de la pandemia Covid 19 nos reuníamos en la ciudad de Pátzcuaro, Michoacán, en los salones del antiguo Colegio Jesuita durante toda la mañana de los sábados de cada dos meses. Ahora, por razones conocidas por todos, el formato presencial, de convivencia y en el que en un espacio intercambiábamos conocimientos, profesionales y público en general, lo tuvimos que cambiar por reuniones virtuales en medios electrónicos.

En 1997 los iniciadores de este seminario –Carlos García Mora y Carlos Paredes Martínez –consideramos que las investigaciones sobre el pueblo y la cultura purépecha venían en aumento, y que la producción historiográfica, en las diversas áreas del conocimiento, se multiplicaba cada vez más, con la consecuente dificultad de estar actualizados en las nuevas investigaciones y proyectos académicos individuales o colectivos que se realizaban en ese entonces. Es así como en ese año tomamos la iniciativa de crear un seminario académico en el que, a través de reuniones sabatinas, invitáramos a investigadores, profesionales y profesores de distintas disciplinas, con el fin de que conociéramos sus proyectos y fueran comentados por conocedores de los temas y personas de las propias comunidades purépecha, también por invitación, y se diera difusión presencial de los avances en las diversas disciplinas que han estudiado sobre el pasado y el presente de este pueblo. Se trataba de abrir un foro, un espacio académico que permitiera no sólo estar actualizados, sino también contribuir a la discusión y al fomento de los estudios sobre este pueblo indígena mayoritario en Michoacán, con una larga trayectoria histórica desde la época prehispánica y que, actualmente, sigue siendo referencia en la lucha por sus derechos y de los pueblos indígenas en general.

La ciudad que elegimos para llevar a cabo este seminario fue la ciudad de Pátzcuaro, desde entonces, ahí nos reunimos hasta el pasado mes de enero de 2020, una ciudad emblemática por su tradición histórica, plenamente identificada por la actual población purépecha. Atractiva para los citadinos de las grandes urbes en México y el extranjero y nostálgica para quienes iniciamos aquí nuestras investigaciones hace 47 años en el seno del cis-inah, bajo la dirección general de la etnóloga María Eugenia Vargas Delgadillo y con la conducción directa del antropólogo y sacerdote michoacano Agustín García Alcaraz.

El formato del seminario Kw’anis, como coloquialmente se le llama, ha sido generalmente con dos expositores por sesión, dos o más comentaristas invitados por cada ponente y desde luego la participación del público asistente que en promedio debe fluctuar entre veinte y cuarenta personas. No obstante, el formato ha variado en torno a mesas redondas sobre un tema en específico como el maíz o la enseñanza de la lengua purépecha, la proyección de videos o sesiones de homenajes a personajes de avanzada edad y que se han distinguido en su larga trayectoria de vida por el estudio de la historia (Benedict Warren), la antropología (†Gildardo González Ramos) o la abogacía en la defensa de las tierras de los pueblos indígenas (†tata Felipe Chávez Cervantes), por su perseverancia asistiendo ininterrumpidamente durante 15 años (Arcelia Ramírez); o bien presentaciones de libros que por su extensión e importancia se les dedica toda la sesión y en las que se invita a investigadores de distintas disciplinas para dar sus puntos de vista y con tiempo razonablemente amplio, para propiciar el diálogo académico con los autores, y sin las formalidades de presentaciones acartonadas con tiempos limitados. Tan sólo doy tres ejemplos: La nobleza indígena de Pátzcuaro en la época virreinal, de Delfina Esmeralda López Sarrelangue; La conquista de Michoacán, 1521-1530, de J. Benedict Warren; y Ser indio otra vez. La purepechización de los tarascos serranos, de Luis Vázquez León. Sesiones memorables en las que la asistencia aumenta fácilmente al doble de lo aquí señalado.

Las temáticas abordadas en más de dos décadas de sesiones bimestrales han sido tan vastas como son los campos del conocimiento y las disciplinas que se han enfocado al estudio de la cultura y el pueblo purépecha en el pasado y en el presente. Invitamos a especialistas mexicanos y de otras nacionalidades, investigadores, estudiantes en sus distintos niveles educativos. Han asistido representantes de concejos municipales de distintas poblaciones de Michoacán, por ejemplo, de Santa Fe de la Laguna, Santa Clara del Cobre y Cherán. Desde luego la presencia de hablantes de la lengua purépecha ha sido importante en los distintos rubros aquí citados, como autores de libros, artículos, videos, equipos de investigación, etcétera. Todos los participantes están dispuestos a compartir sus conocimientos, intercambiar puntos de vista y darlos a conocer en un ámbito propositivo y respetuoso. En 23 años de sesiones del seminario, con más de 130 celebradas desde el inicio y con cerca de ochocientos participantes entre ponentes, comentaristas, equipos de investigación colectivos, etc., sería imposible relatar aquí los nombres de los incluidos en los respectivos programas preparados con anticipación, o las instituciones de las que proceden, entre universidades, centros de investigación, promotores culturales, artistas visuales, artesanos, escritores en sus distintas especialidades, etcétera, por lo que sólo menciono las disciplinas y temas de especialización que han estado representadas en el seminario: antropología, arqueología, etnohistoria, historia, lingüística, educación intercultural, salud y genética, medicina tradicional, gastronomía, literatura, música y danza, migración, ecología y medio ambiente, temas agrarios, museografía, archivonomía, fotografía, textiles e indumentaria, vulcanología y arqueosismología, urbanismo, códices y epigrafía, género, geografía cultural, políticas públicas y declaratorias patrimoniales, nuevas identidades e interculturalidad, etcétera.

Dice la canción que 20 años no es nada, de manera que 23 debe andar por lo mismo, no obstante, por las bancas de los salones del frío y antiguo Colegio Jesuita en Pátzcuaro han circulado ya generaciones de estudiosos del pueblo purépecha, desde los hijos de colegas que formaron parte de la primera generación del Programa de Formación Profesional de Etnolingüistas en el cis-inah, ideado por Guillermo Bonfil y en el que fueron piezas fundamentales Luis Reyes García, Pedro Carrasco Pizana y Agustín García Alcaraz a finales de la década de 1970 y que hoy son profesionales y promotores del estudio de la lengua purépecha; estudiantes que presentaron su protocolo de licenciatura aquí y hoy igualmente están en posgrados o son investigadores; o bien colegas que salen de las reuniones muy agradecidos por los comentarios y observaciones, y reiteran sus agradecimientos al seminario Kw’anískuyarhani en sus publicaciones de libros, artículos o tesis. Así que no hay ningún ambiente frío, más bien calor humano, estímulos a la investigación y muchas preguntas que se plantean y quedan por resolver.

¿Cuáles son los testimonios que quedan de estas reuniones? Ciertamente una de las riquezas del seminario son los comentarios, observaciones y diálogo que se entabla entre los asistentes y, desgraciadamente, muy poco de esta riqueza queda registrada. La historiadora Marta Terán y el que esto escribe planteamos la iniciativa de crear una colección de publicaciones que recogiera de alguna manera lo expuesto en las sesiones y así lo hicimos con cuatro títulos. Sin embargo, hay que reconocer que es una mínima parte del conocimiento que ha circulado en el seminario y sería una labor ingente y de dedicación exclusiva, abocarse a sistematizar toda la información y discusiones que se han generado en las sesiones, labor que ninguno de los coordinadores podemos realizar por las distintas ocupaciones; tenemos, no obstante, algunas sesiones grabadas en video que amablemente han realizado algunos de los asistentes y las han compartido.

Como se decía al principio, se ha tenido que cambiar el formato de las sesiones por medios electrónicos. En la sesión de aniversario en julio pasado, tuvimos nuestra segunda sesión virtual por medio de una plataforma de videoconferencia y retransmitida en vivo por Facebook, donde desde luego la audiencia creció sustancialmente y para ser novatos en esto, creemos que han resultado satisfactorias. No obstante, no nos ilusionamos por el alto número de los receptores y repeticiones de las sesiones completas en ese medio en la cuenta “yo soy Kwanis”, de Facebook, administrada por una de las coordinadoras Claudia Pureco, sabemos que no todos están realmente interesados en las exposiciones y hasta ahora no se ha dado una interacción amplia entre ponentes y público receptor, sí se aceptan preguntas y se dan respuestas. Sin embargo, no se da el intercambio que acostumbrábamos en las sesiones presenciales, ni en las pláticas informales concluidas las sesiones y en las largas despedidas. En fin, estamos experimentando nuevas formas de comunicación, y además, ahora ya pueden “conectarse” colegas de diversas partes, especialmente estudiosos y amigos que viven en los Estados Unidos, que ya nos conocen y han asistido al seminario en el pasado y que nos pedían hace tiempo estas formas de interactuar en forma virtual y hasta habían propuesto conformar un Kw’anis en este país.

Cuatro somos los coordinadores del seminario en los últimos años, en orden alfabético: Aída Castilleja González, Carlos García Mora, Benjamín Lucas Juárez, Carlos Paredes Martínez y Claudia Alejandra Pureco Sánchez. También son cuatro los títulos publicados en la colección Kw’anískuyarhani y cuyos directores son Marta Terán y el que esto escribe:

 

Pie de foto: Coordinadores del seminario Kw’anískuyarhani Estudiosos del Pueblo Purépecha. Atrás: Carlos Paredes Martínez, Aída Castilleja González, Carlos García Mora y Benjamín Lucas Juárez. Adelante: Claudia Alejandra Pureco Sánchez. Patio central del Antiguo Colegio Jesuita, ciudad de Pátzcuaro, Michoacán, 27 de Julio de 2019. (Foto Rodolfo Gabriel Oliveros Espinosa, INAH).

Bibliografía

Carlos García Mora (ed.) (2004), Enigmas sobre el pasado y presente del pueblo purépecha. Problemas científicos por resolver, Morelia, umsnh-iih, Gobierno del Estado de Michoacán, Coordinación Interinstitucional para la Atención de los Pueblos y Comunidades Indígenas del Estado de Michoacán, Morevallado Editores, 140 pp.

Pedro Márquez Joaquín (ed.) (2007), ¿Tarascos o purépecha? Voces sobre antiguas y nuevas discusiones en torno al gentilicio michoacano, Morelia, umsnh-iih-El Colegio de Michoacán-Gobierno del Estado de Michoacán, uiim, Fondo Editorial Morevallado, 256 pp. (Anexo: relación de participantes en 10 años del seminario Kw’anískuyarhani).

Claudine Chamoreau (2009), Hablemos purépecha. Wantee juchari anapu, Yekaterina Manuelyevna García (trad.), Morelia, umsnh-iih-uiim-ird-Ambassade de France au Mexique-ccc-ifal-Fondo editorial Morevallado, 556 pp, + CD.

Luise M. Enkerlin Pauwells (ed.) (2012), Abriendo caminos. El legado de Joseph Benedict Warren a la historia y a la lengua de Michoacán, Morelia, inah_El Colegio de Michoacán-umsnh-iih-Editorial Morevalladolid, 502 pp.