Autonomía indígena: la crisis pandémica y las respuestas comunitarias en Cherán K’eri.

Alicia Lemus Jiménez,

Doctora en Antropología Social por la UNAM, profesora investigadora UPN Unidad 161;

Juan Jerónimo Lemus,

Investigador popular comunitario, Centro de Formación Sesi Irekani, Cherán;

Fernando Jerónimo Juárez,

Estudiante de posgrado, Maestro en Ciencias por la Facultad de Economía / UMSNH.


Los jóvenes salieron a tomar las barricadas para regular el acceso a la comunidad ante la emergencia sanitaria del mismo modo como lo hicieron durante el movimiento.

Los jóvenes son una verdadera fuerza comunitaria.

Imagen 1. Barricada «F2» salida a Uruapan, Michoacán. A partir del COVID-19, las barricadas (entradas/salidas a la comunidad de Cherán) se han reforzado con filtros sanitarios. Fotografía: Sesi Irekani, colectivo (mayo, 2020).

Cherán, nueve años de organización comunitaria

Cherán es un municipio indígena del estado de Michoacán, México. En el 2011 inició un movimiento en defensa del bosque, bajo el lema por la seguridad, justicia y reconstitución del territorio. En medio de un país convulsionado por la violencia Cherán debía responder al asedio del crimen organizado. Había incursionado en su territorio mediante la explotación del bosque, a la postre, en contubernio con las autoridades municipales tomaron el control de la comunidad hasta convertirlo en un espacio inhóspito.

Sin embargo, nunca dejó de rumorarse la necesidad de organizarse para hacer frente al despojo. Los primeros intentos fueron reprimidos con lujo de violencia y muerte. En consecuencia, el miedo aumentó hasta inhibir la vida comunitaria. Después de mucho resistir las vejaciones del crimen organizado, la madrugada del 15 de abril del 2011 encabezados por las mujeres se logró frenar a los talamontes.

A partir de ese día comenzó la reorganización comunitaria, cuya primera decisión fue la expulsión de los partidos políticos, hasta alcanzar a constituir la Estructura de Gobierno Comunal (EGC)[2].

La EGC se fundamenta en los usos y costumbres de la comunidad, son una forma de autonomía arraigada en la capacidad de autodeterminarse en sus modos y formas de gobierno. La asamblea es el núcleo vital a partir de ella se consensua la toma de decisiones. Posteriormente son ejecutadas por alguno de sus consejos operativos.

Crisis pandémica desde la comunidad

Cherán, del mismo modo que el resto de las comunidades indígenas del país está experimentando la pandemia. Los temas de salud pública, la recesión de la economía local y los efectos psicológicos son algunos de los problemas que enfrenta la comunidad. En el imaginario comunitario surgen las preguntas: ¿cuánto tiempo va a durar? y ¿cómo vamos a enfrentarlo si no contamos con la infraestructura médica para atender problemáticas de esta naturaleza?

La pandemia ha demostrado la incapacidad del Estado para resolver el tema de salud pública de los p’urhépechas. Es este sentido, la comunidad de Cherán enfrenta serios problemas de enfermedades crónico degenerativas: la diabetes, hipertensión y obesidad, quien la padece es la población adulta que oscila entre los 22 y 70 años de edad. Las enfermedades son producto del cambio en el sistema alimentario y los hábitos de salud en la vida cotidiana de los indígenas. Por otra parte, el COVID-19 evidencia la vulnerabilidad en la que se encuentra la comunidad ante la pandemia que ha hecho estragos en este sector de la población en las grandes urbes. Aunado a ello, existe preocupación porque la infraestructura médica para hacerle frente es débil. De presentarse un brote de COVID-19 es alta la probabilidad de un cuadro infeccioso con consecuencias devastadoras para los comuneros y comuneras.

A raíz de la contingencia sanitaria la economía local ha sufrido un descenso superior al vivido durante los meses de abril, mayo y junio de 2011 en consecuencia del auto sitio del movimiento por defensa de los bosques. Se habían cerrado los accesos a la comunidad para protegerse del crimen organizado. La crisis económica pudo sobrellevarse gracias a las donaciones económicas y en especie que hicieron las comunidades vecinas, colectivos, asociaciones civiles, público en general y paisanos en el extranjero. Ahora la recesión económica es un problema nacional e internacional, por consiguiente, es nulo el apoyo de grupos de la sociedad civil que realicen aportes económicos o en especie.

El sistema económico de Cherán tiene una base local comunitaria, así mismo está influenciado por la economía regional, de tal manera que existe una dependencia de ciudades comerciales como Zamora y Uruapan. El consumo y comercio de productos que no son de primera necesidad se han visto afectados en un 80%; el de los alimentos, ha experimentado descenso mínimo. La falta de trabajo local ha ocasionado que las familias empiecen a desesperarse y exigir atención por parte del gobierno comunal y estatal. Por lo tanto, como sucede en los casos de emergencia la comunidad ha sobrepasado las medidas oficiales. De manera similar a lo acontecido en el movimiento las respuestas son buscadas en los saberes comunitarios.

En la memoria colectiva de la comunidad están las narraciones de la fiebre española propagada en la segunda década del siglo XX. Cuentan los abuelos que murieron decenas de cheranenses a causa de la enfermedad. Por miedo al contagio algunos huyeron a los cerros para refugiarse, otros se quedaron en casa sin salir para no contagiarse. Una de las principales características era la fiebre alta, coloquialmente se le conoció a la enfermedad como “la fiebre”.

«Me contaba mi mamá que cuando ella fue niña se dio “la fiebre” en el pueblo. Mucha gente murió. Otros se fueron a vivir al cerro porque tenían miedo a contagiarse. Ella como era huerfanita vivía con una tía y no la dejaba salir porque mucha gente moría por eso. En ese tiempo la enfermedad duró más de dos años» (Francisca C. R. Cherán, Mich., mayo 2020).

«En tiempos de “la fiebre” cuando sabían que ya había un infectado en alguna casa iba el carretero y lo sacaban agonizando para llevarlos a enterrar. Habían hecho un solo pozo para enterrar a esos enfermos. Era hondo y ahí los enterraban, los cubrían con tierra y encima iban poniendo a los demás. Dicen que muchos de los contagiados todavía iban quejándose, pero así los enterraban por miedo a que contagiaran a los demás» (Pedro L. V. Cherán, Mich., mayo 2020).

Estas narrativas demuestran que para la comunidad de Cherán la historia de las pandemias y sus efectos no son temas novedosos. Las personas mayores cuentan las historias para mitigar el miedo en los jóvenes. En la narrativa de los abuelos persiste la idea de cuidar a la juventud y niñez a fin brindarles la oportunidad de vivir. Es común escuchar la frase: “nosotros ya vivimos, bien o mal ya cumplimos con lo que teníamos que hacer en esta vida, ahora nos toca cuidar a los jóvenes y niños para que ellos un día lleguen a viejos”. La frase encierra un pensamiento comunitario, la función de los abuelos es ser guías y consejeros de las siguientes generaciones. Lo que demuestra la importancia de la memoria y saberes de los abuelos como pilares morales y personas de experiencia y respeto en la cultura de los p’urhépechas de Cherán.

Las alternativas comunitarias frente a la crisis sanitaria

Se lee que la pandemia ha desarticulado la idea del individualismo, se piensa en el fin del modo de producción capitalista y, por tanto, el inicio de una era postcapitalista con un sentido amplio de lo colectivo[3]. Caso diferente para las comunidades indígenas que ya tienen una extensa interpretación de lo colectivo en su cotidianidad comunitaria. La crisis sanitaria deja entrever una impotencia. Cherán, en cuanto comunidad indígena, fortalece su cohesión comunitaria por medio de sus rituales, fiestas, asambleas, usos y costumbres, por lo que las medidas de aislamiento y distanciamiento social que promueven los organismos de salud oficial parecen contrarias a la vida en comunidad.

Sin embargo, se trata de que la organización comunitaria sea la mayor fortaleza para enfrentar la pandemia. Como se ha referido, a lo largo de los últimos nueve años en los que la comunidad de Cherán se ha regido bajo una forma de autogobierno comunal, se han configurado varios proyectos para el rescate de las formas ancestrales de vida. Se trata de darle un mayor impulso al sentido comunitario, cultural y de racionalidad para la vida; el rescate del territorio, formas tradicionales de cultivo, el regreso al campesinado, fortalecer las fiestas tradicionales y la identidad étnico territorial. En el mismo sentido con el tema de salud. La Comisión de Salud, dependiente del Concejo de los Asuntos Civiles de la EGC, es la responsable de ordenar la estrategia para contrarrestar los efectos de la crisis sanitaria.

La toma de decisiones emana de los saberes y modos de organización étnico-ancestrales imbricados con planteamientos técnicos, tanto en la actual crisis como en los diversos ámbitos de acción de la comunidad. Lo que parece ser un acto que confronta solo las dificultades actuales de salud, echando mano de su organización comunitaria, en realidad representa el recorrido mismo de la cotidianidad comunitaria, es decir, si bien, la crisis sanitaria puso en alerta a la comunidad, se siguió la misma línea organizativa para abordar los diversos temas relevantes para Cherán: informar, analizar, proponer, consensuar y ejecutar desde la asamblea comunal. Bajo este principio, el 15 de marzo, la Comisión de Salud informó sobre el COVID-19 a las Asambleas de la Comunidad[4]. Desde la asamblea se esbozaron los primeros planteamientos para afrontar la situación y se dio total respaldo a las medidas de mitigación que la EGC fuese a tomar. No son estrategias alejadas de las políticas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud y de la Secretaria de Salud del Gobierno Federal. Lo relevante es que desde las diversas asambleas de la comunidad se replantearon, en este sentido, más del 80% de la población, en medidas de sus posibilidades, las han acatado. La población restante, adherida generalmente, al sector de comerciantes ambulantes y a los “partidistas”[5] resisten a las estrategias de la EGC. Tanto por disputas políticas como por la caída en las ventas de productos no esenciales y no tener una estrategia definida en el rescate económico del comercio ambulante.

Las acciones, por lo tanto, se concentran en concientizar a los comuneros de las principales recomendaciones para evitar la propagación, se realizan por medio del perifoneo y de talleres a sectores económicos claves de la comunidad. Además, del cierre de espacios públicos y cancelación de todo tipo de eventos que aglutinen gente, uno de éstos fue la conmemoración del noveno aniversario en defensa de los bosques a realizarse el 15 de abril[6].

Evidentemente, la autodeterminación, autogobierno y autonomía comunitaria que ejerce Cherán ha permitido que, a la par de las recomendaciones emitidas por las instituciones de salud, pueda proponer otras estrategias que ayuden con el bloqueo, o en su caso, tener el menor número de contagios al interior de la comunidad. Estas estrategias, se concentran en reducir la movilidad de las y los comuneros, tanto al interior como al exterior de la comunidad; teniendo más rigurosidad en este último. El quédate en casa, paso a ser el quédate en comunidad, por lo que se ha disminuido sustancialmente la salida y entrada de comuneros (as) a Cherán. Esto no quiere decir que al interior se desarrolle la vida cotidiana; hay un toque de queda y el mercado comunal se ha reducido a la venta de productos esenciales. Para controlar el flujo hacia el exterior se han reforzado las barricadas y se han instalado filtros sanitarios a las entradas del pueblo a cargo de la ronda comunitaria[7]. No se han cerrado las barricadas en su totalidad, se ha limitado el acceso a la comunidad a dos personas por vehículo de municipios vecinos, todo dentro del margen del respeto a los derechos humanos. A los migrantes cheranenses, tanto a los que se encuentran al interior del país como a los que radican en otro, se les ha pedido que no visiten Cherán.

Ante la inflación de los precios de la canasta básica, el gobierno comunal ha decidido establecer una cooperativa de consumo con el objetivo de mantener el equilibrio de los precios de los productos esenciales.

Para enfrentar la pandemia del COVID-19 en la comunidad, se ha volteado a mirar la sabiduría de las generaciones adultas “abuelos”, su sistema alimentario, su saludo con cierto distanciamiento[8], su forma de vida. Los comuneros (as) son conscientes de que, si llegase la pandemia a la comunidad seria desastroso. Por lo tanto, se han aceptado las medidas. En este punto, lo que hace diferente a Cherán, y quizá al resto de las comunidades indígenas, frente al resto de las poblaciones ante la pandemia, es precisamente la organización y vida comunitaria. El énfasis en la seguridad, la justicia y la reconstitución del territorio.

Entrevistas

Francisca C.R., Cherán, Michoacán, mayo de 2020.

Pedro L.V., Cherán, Michoacán, mayo de 2020.

Salvador Campanur, Consejo Mayor, Cherán, Michoacán, mayo de 2020.

Salvador Adame, Consejo Mayor, Cherán, Michoacán, mayo de 2020.

Jobita Ziranda, Honor y Justicia, Cherán, Michoacán, mayo de 2020.

David Romero, Concejo de Jóvenes, Cherán, Michoacán, mayo de 2020.

Oliveros Macías, Comisión de Salud, Cherán, Michoacán, mayo de 2020.

  1. Comunera (os) de Cherán: Doctora en Antropología Social por la UNAM, profesora investigadora UPN Unidad 161, Morelia, Mich.; Investigador popular comunitario, Centro de Formación Sesi Irekani, Cherán; Estudiante de posgrado, Maestro en Ciencias por la Facultad de Economía / UMSNH.
  2. Derecho obtenido mediante juicio jurídico-política ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
  3. Véase: ŽiŽek, S. (2020). Coronavirus es un golpe al capitalismo al estilo de ‘Kill Bill’ y podría conducir a la reinvención del comunismo. En Amadeo, P. (Ed.), Sopa de Wuhan: Pensamiento contemporaneo en tiempos de pandemia (pp. 21-28). Argentina: ASPO.Butler, J. (2020). El capitalismo tiene sus límites. En Amadeo, P. (Ed.), Sopa de Wuhan: Pensamiento contemporaneo en tiempos de pandemia (pp. 59-65). Argentina: ASPO.Harvey, D. (2020). Política anticapitalista en tiempos de COVID-19. En Amadeo, P. (Ed.), Sopa de Wuhan: Pensamiento contemporaneo en tiempos de pandemia (pp. 79-96). Argentina: ASPO.

    Zibechi, R. (2020). A las puertas de un nuevo orden mundial. En Amadeo, P. (Ed.), Sopa de Wuhan: Pensamiento contemporaneo en tiempos de pandemia (pp. 113-118). Argentina: ASPO.

    Botto, C. (2020). La salida será colectiva o no será: apuntes para una nueva economía. En Amadeo, P. (Ed.), Fiebre: Pensamiento contemporaneo en tiempos de pandemia (pp. 199-210). Argentina: ASPO.

  4. El Plan de Desarrollo de la Comunidad de Cherán dice: K’eri tángurikua – La Asamblea es la máxima autoridad de nuestra comunidad. La cual se integra por cada uno de los «ireticha» – comuneros hombres y mujeres de los cuatro barrios, que independientemente de sus representantes y voceros que tienen en el Concejo Mayor de Gobierno (k’eri jáKaskaticha), aquí ejercen su representación personal y directa con derecho a voz y voto.
  5. Pobladores de Cherán que siguen simpatizando con algún partido político.
  6. En entrevista a Oliveros Macías, representante de la Comisión de Salud del gobierno comunal.
  7. Cuerpo de seguridad comunitario elegido con base en los usos y costumbres.
  8. Las generaciones mayores, su saludo es exento de abrazos o besos en mejilla.