Competencias ciudadanas. Modelo de Aprendizaje Cívico Democrático como Estrategia Didáctica

Juan Jesús Estrella Chávez | jestrella@cciudadano.org.mx / jestrella@ciesas.edu.mx
Jessica Pérez Guerrero | jessicapeg@cciudadano.org.mx / jessica_pg@ciesas.edu.mx
Programa Especial CCIUDADANO Construcción y articulación de lo público | www.cciudadano.mx | www.institutocciudadano.mx


Introducción

A lo largo de 14 años, CCiudadano se ha dedicado a impulsar el vínculo permanente entre ciudadanía, representantes y servidores públicos, para que las y los ciudadanos puedan participar activamente en la vida pública, mediante la articulación colaborativa entre actores estatales y sociales, el desarrollo de competencias cívico democráticas y la generación de conocimiento y herramientas para la incidencia en decisiones públicas.

El fortalecimiento del trabajo de organizaciones y grupos ciudadanos se ha realizado a partir de una metodología de trabajo que nombramos Control Ciudadano de lo Público (CCP): un tipo de participación ciudadana sustantiva que realizan actores sociales informados, organizados y orientados por un conjunto de principios de todo régimen democrático y la exigencia de derechos que le es consustancial, con la intención de influir en la toma de decisiones públicas y mejorar en algún sentido su calidad de vida y la de las personas afectadas por la acción o inacción gubernamental.

De acuerdo con nuestra experiencia, el trabajo de los actores sociales que pretenden exigir la intervención de las autoridades gubernamentales para dar solución a un problema público, está obstaculizado por la carencia de conocimientos, destrezas y habilidades para hacerlo.

Pero ¿qué pasaría si desde las etapas formativas iniciales se favoreciera la posesión de estos recursos? Con esta pregunta como referencia, CCIUDADANO ha diseñado una práctica escolar que ha cristalizado en el Modelo de Aprendizaje Cívico Democrático como Estrategia Didáctica (MACDED) con el que se espera contribuir al desarrollo de competencias cívico ciudadanas que permitan el involucramiento sustantivo de la ciudadanía en la toma de decisiones gubernamentales.

Del Modelo de Aprendizaje Cívico Democrático (MACD) al Modelo de Aprendizaje Cívico Democrático como Estrategia Didáctica (MACDED)

El MACD es una práctica escolar que inicia con la solicitud docente para que las y los estudiantes identifiquen una situación concreta que problematizarán, con base en un conjunto de categorías, conceptos y referentes valorativos, que además reconocerán en el complejo entramado de decisiones públicas, procesos administrativos y dinámicas políticas. En cada grupo escolar se conformarán equipos que generarán un diagnóstico con propuestas de solución que integrarán en un proyecto de incidencia. La apuesta es que este tipo de proyectos eventualmente se lleven a la práctica o bien que el método del control ciudadano de lo público aprendido sirva como referente para ejercicios semejantes que potencialicen procesos de incidencia pública posteriores y coadyuven a reducir el marcado déficit democrático prevaleciente en el país.

Diagrama 1. Modelo de Aprendizaje Cívico Democrático

Este modelo se ha difundido tanto con profesores como con estudiantes. Con los profesores se busca que adquieran los conocimientos teóricos y metodológicos que le dan sustento a este modelo mediante un curso en el que desarrollan una propuesta de práctica escolar para implementarlo con sus estudiantes.

Durante cinco generaciones profesores y profesoras universitarios en todo el país se convirtieron en replicadores de este MACD. En 2019, luego de una invitación para adaptar este modelo para estudiantes de secundaria, nos dimos a la tarea de diseñar un proyecto al que nombramos Construyendo la Adolescencia Ciudadana (2019-2021) con el objetivo de “Generar y fortalecer competencias cívicas en población adolescente a partir de compartir con sus profesores la metodología de ACD a través de diversos materiales.”

Primera etapa. Desarrollo de Competencias del CCP

La implementación de este proyecto implicó varias etapas; la primera, consistió en desarrollar nuestra propia definición de competencia del CCP:

Una disposición integrada por un conjunto de conocimientos sobre ciudadanías, el funcionamiento gubernamental y la normatividad prevaleciente; de destrezas y habilidades para construir y visibilizar problemáticas, elaborar diagnósticos, formular propuestas de solución y crear espacios de interlocución con distintos actores; de valores y actitudes que desde la teoría democrática, el respeto y los derechos ciudadanos manifiestan el objetivo de incidir de manera eficaz y con sentido en procesos de toma de decisiones gubernamentales, en contextos donde se reconoce la violación de algún derecho.

Una vez que tuvimos esta definición general, identificamos las competencias del CCP que se desarrollan durante la implementación de un proyecto de incidencia. Iniciamos reconociendo que este modelo de aprendizaje se integraba con tres componentes de trabajo: a) construcción de un discurso (etapa narrativa), b) diseño y ejecución de estrategia (etapa estratégica), y c) negociación con tomadores de decisiones y seguimiento de actividades.

Para cada uno de estos componentes se desarrollaron competencias generales, particulares y específicas. Pero ahora la pregunta era, cómo hacer para que las y los profesores de nivel secundaria incluyan el MACD en sus clases; pues en contraste con la libertad de un profesor universitario para incorporar temas o proyectos, un profesor de nivel secundaria debe apegarse a los contenidos establecidos en el programa escolar vigente.

Diagrama 2. Actividades núcleo del Método del Control Ciudadano de lo Público.

El reto fue entonces elaborar una estrategia didáctica que les permitiera incorporar las competencias del CCP en sus cursos o asignaturas, sin menoscabo del tiempo para cumplir con la impartición de contenidos de su programa. Fue así como revisamos la propuesta pedagógica de la enseñanza a nivel secundaria y nos dimos cuenta que ésta partía de la adquisición de aprendizajes clave o propósitos de la enseñanza, que nos daban la pauta para el desarrollo de las competencias del CCP.

Consideramos que la construcción de ciudadanía no debía circunscribirse a una asignatura especifica como Formación Cívica y Ética y la revisión de los aprendizajes claves y propósitos de la enseñanza de las asignaturas impartidas a nivel secundaria nos dio pistas sobre cómo desarrollar esta propuesta de trabajo, sin acotarla a la asignatura referida.

Las Unidades de Formación y secuencias didácticas

La formulación de nuestra propuesta pedagógica para incorporar el MACD como una práctica escolar en el nivel secundaria tiene como ejes principales el desarrollo de competencias cívico ciudadanas a través de una metodología de aprendizaje situado, basado en la solución de problemas con base en la exigencia de derechos.

En conjunto la propuesta se sintetiza en la Unidad de Formación, un diseño creativo del facilitador (puede ser un profesor o una profesora, aunque no se circunscribe a esta figura) para favorecer el desarrollo de competencias, sobre la base de la recuperación de conocimientos previos, ensayadas en una práctica situada y orientada por los valores cívico-ciudadanos de un régimen democrático.

La definición que utilizamos es muy próxima a lo que se entiende como diseño curricular de aula, que expone Fragoso (2016), pero no queda limitada a este espacio porque, si bien la Unidad de Formación puede abarcar una o varias sesiones, la planeación de una asignatura, un taller, de uno o más ciclos escolares, también puede ser una actividad llevada a cabo por diferentes profesores que impartan el mismo grado académico o la misma asignatura, o entre profesores que impartan diferentes asignaturas o grados académicos, un proyecto formativo e incluso una actividad didáctica fuera de los espacios escolares institucionales.

En ella, la persona que facilita realiza una primera exploración sobre las condiciones del grupo tanto a nivel académico, de intereses y del contexto en el que viven las y los aprendices; además, pone a dialogar a los aprendizajes clave o propósitos de la enseñanza con las competencias del CCP para pensar en las posibilidades y definir qué hará en su unidad de formación: incentivar a sus estudiantes para que formulen proyectos de incidencia, creen campañas sobre una temática, elaboren un periódico mural o cartas de petición a las autoridades educativas o gubernamentales, entre otras.

En la unidad de formación también se define el periodo que durará la actividad, el número de horas o sesiones que dedicarán, y esboza de manera general las actividades iniciales, de desarrollo y de cierre. La descripción más detallada de lo que hará con sus estudiantes para que desarrollen competencias del CCP se encontrará en las secuencias didácticas que son una herramienta, cuyo formato permitirá establecer un conjunto de actividades de enseñanza-aprendizaje y referentes de evaluación para el desarrollo de una o algunas competencias en los temas de estudio abordados, con la mediación del facilitador y en consideración a una serie de recursos didácticos diseñados exprofeso o retomados de otras propuestas didácticas.

La secuencia didáctica también incluye una matriz de valoración, donde se establecen los criterios para identificar si la o el estudiante desarrolla la competencia del CCP.

Segunda etapa. La implementación con profesores

En paralelo a las actividades previas, nos dimos a la tarea convocar a profesores de nivel secundaria, de al menos siete entidades del país: Yucatán, Veracruz, Guerrero, Morelos, Baja California, Estado de México, Chihuahua y Ciudad de México. Se presentó el proyecto a autoridades educativas, directivos y profesores; los contextos y factores como acceso a internet, carga de trabajo frente grupo(s) hizo que de una lista inicial de 36 docentes sólo culminarán seis el Curso taller para realizar prácticas escolares de aprendizaje cívico democrático en el nivel secundaria, así como, el diseño de sus unidades de formación con sus respectivas secuencias y recursos didácticos.

El trabajo desarrollado por estos profesores fue realizado con un acompañamiento de parte del equipo de CCIUDADANO, con el objetivo de apoyarles a plantear sus unidades de formación. Esto también nos sirvió para conocer más sobre la diversidad de contextos en los que imparten clases, las necesidades y las preocupaciones de las y los adolescentes frente a los que están y que cristalizaron en una revista escolar, una campaña de concientización sobre la violencia escolar, una campaña por el derecho a la cultura y el involucramiento efectivo de los adolescentes en asambleas, en conjunto, prácticas escolares diseñadas para desarrollar competencias del CCP.

Tercera etapa. Implementación de las Unidades de Formación

Una vez que cada profesora y profesor detallaron sus unidades de formación, secuencias y materiales didácticos, el siguiente paso era la implementación de éstas con las y los estudiantes. Sin embargo, el contexto de confinamiento derivado de la declaración de la pandemia en marzo de 2020 impidió la implementación y acompañamiento presencial.

Imagen 1. Visita de profesores participantes del proyecto CAC a la CDMX. Febrero 2020.

No obstante, este tiempo de guarda nos dio la oportunidad de mejorar la propuesta inicial del Curso taller Fundamentos para realizar prácticas escolares de aprendizaje cívico democrático en el nivel secundaria. En junio de este año convocaremos nuevamente a profesoras y profesores de este nivel de enseñanza.

Esta segunda edición contará con distintos materiales producidos en el marco del proyecto Construyendo la Adolescencia Ciudadana[1]: un texto donde se detalla el MACDED; un Manual para la elaboración de diagnósticos para la incidencia; las unidades de formación diseñadas por los profesores participantes en la primera edición y, una aplicación creada para que los profesores diseñen de manera sencilla sus prácticas escolares y los estudiantes, al igual que el público en general, realicen diagnósticos para fundamentar sus proyectos de incidencia.

Para cerrar este documento, cabe mencionar que inicialmente las unidades de formación fueron diseñadas para actividades de enseñanza-aprendizaje en una modalidad presencial. El confinamiento forzado y la forma como apreciamos se afrontó el problema para mantener las actividades de educación en México, nos mostró la necesidad de diseñar propuestas en la modalidad a distancia, por lo que los materiales en conjunto también se adaptaron a esta necesidad. En la plataforma www.institutocciudadano.mx pueden consultarse el conjunto de materiales referidos.

Bibliografía


  • Carrillo Mardones, Olga (2013), “Comprendiendo la adquisición de las competencias ciudadanas en alumnos de los programas de cualificación profesional inicial”, en Educar, vol. 49, núm. 2, Barcelona, Universitat Autònoma de Barcelona, pp. 207-226.
  • CCiudadano (2021), Modelo de Aprendizaje Cívico Democrático como Estrategia Didáctica, México.
  • Díaz-Barriga, Ángel (2013), Guía para la elaboración de una secuencia didáctica, México, unam.
  • Díaz Barriga Arceo, Frida (2006), Enseñanza situada: vínculo entre la escuela y la vida, México, McGraw Hill.
  • Delors, Jacques (1996), “Los cuatro pilares de la educación”, en La educación encierra un tesoro. Informe de la UNESCO de la Comisión internacional sobre la educación para el siglo XXI, España, Santillana-UNESCO, pp. 91-103.
  • Fragoso, David (2016), “Diseños curriculares de aula por capacidades y valores”, en Revista Boletín Redipe, vol. 5, núm. 11, pp. 79-94.
  • Frade Rubio, Laura (2009), La evaluación por competencias, 3ª ed., México, Inteligencia Educativa.
  • ———- (2015), Conferencia magistral “Competencias docentes y diversidad”, Oaxaca, Instituto Multidisciplinario de Especialización.
  • Serrano González-Tejero, José Manuel y Rosa María Pons Parra (2011), “El constructivismo hoy: enfoques constructivistas en educación”, en Revista Electrónica de Investigación Educativa, vol. 13, núm. 1, 27 pp, recuperado de: http://redie.uabc.mx/vol13no1/contenido-serranopons.html.
  • Tobón, Sergio (2013), “El concepto de competencias. Una perspectiva socioformativa”, en Formación integral y competencias, Madrid, ecoe, pp. 87-107.
  • ————— y Guadalupe Mucharraz (2010), ¿Cómo abordar el modelo de competencias? En la práctica docente, México, Conrumbo.
  • —————, Julio Pimienta y Juan García (2010), Secuencias didácticas: aprendizaje y evaluación de competencias, México, Pearson Educación.
  1. Las actividades del proyecto Construyendo la Adolescencia Ciudadana se realizaron entre abril de 2019 y agosto de 2021, fueron financiadas con recursos de la Fundación Alberto Baillères. La responsabilidad del proyecto recayó en Juan Jesús Estrella Chávez; la coordinación de actividades en Jessica Pérez Guerrero y Óscar Armando Cruz González; la asesoría pedagógica en Mariana Jacinto Antonio.