Agua y tierra: en San Gabriel Chilac, Puebla, y San Juan Teotihuacán, Estado de México. El impacto de la reforma agraria sobe el gobierno local, 1917-1950.

Agua y tierra: en San Gabriel Chilac, Puebla, y San Juan Teotihuacán, Estado de México. El impacto de la reforma agraria sobe el gobierno local, 1917-1950

Jesús Édgar Mendoza García, México: Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, 2016.

A partir del contexto de las políticas de centralización del Estado mexicano, este libro analiza el impacto de la reforma agraria sobre la institución municipal y da cuenta del despojo y desplazamiento e que fueron objeto los gobiernos locales por parte de la federación durante la primera mitad del siglo XX. Al mismo tiempo, intenta ofrecer una interpretación que va más allá de las visiones generales que sostiene el fortalecimiento del gobierno federal a costa de las autonomías regionales, o de aquellas visiones que señalan una diversidad de prácticas políticas y la debilidad del Estado. Lejos de un estudio institucional y político esclarece las relaciones sociales y los diferentes mecanismos de negociación que se establecieron entre líderes locales, municipios, ejidos, pueblos y el gobierno federal. Mediante el análisis comparativo, se observan similitudes y diferencias, por lo pronto, de dos municipios de dos estados de la república mexicana, con condiciones económica específicas, donde abundaron los conflictos por el agua y la tierra entre el ayuntamiento, los terratenientes, pueblos, ejidatarios, pequeños propietarios y juntas de agua.

Las políticas centralistas no siempre afectaron al gobierno municipal. Por el contrario, en un periodo de grandes cambios, sólo el Estado fuerte y centralizado podría dotar de los nuevos servicios a los vecinos de los pueblos para establecer una nación moderna. En el nuevo contexto internacional y nacional, el municipio por sí solo ya no podría llevar a sus habitantes los nuevos servicios como el agua potable domiciliaria, electricidad, centros de salubridad, carreteras, presas, sistemas de riego y escuela de nivel medio superior, entre otros. Estas fueron algunas de las razones para que la institución municipal aceptara finalmente la injerencia federal, y aunque perdió ciertas atribuciones y decisiones, en el mediano y largo plazo obtuvo otros beneficios.